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domingo, 15 de agosto de 2021

EL PRESIDENTE QUE MATA, ¿ QUIÉN ES ?

 

EL PRESIDENTE QUE MATA, ¿ QUIÉN ES ?


ENLACE MERCOLA 


 

 El daño de permanecer demasiado tiempo sentado se destaca en 2 artículos publicados en esta edición de Mayo Clinic Proceedings . Kulinski et al.

relacionan la baja aptitud física con el sedentarismo incluso cuando se tiene en cuenta la participación en el ejercicio, mientras que Shuval et al.

ir un paso más allá; en sus análisis longitudinales, se demuestra que el sedentarismo predice en última instancia el riesgo cardiometabólico. Los datos de estos 2 informes se suman a un creciente cuerpo de evidencia científica de que estar demasiado sentado es letal. 

Estar demasiado sentado se ha relacionado con más de 2 docenas de enfermedades y afecciones crónicas, incluidas las enfermedades cardiovasculares, la diabetes mellitus, la obesidad, la hipertensión, la hiperlipidemia, el dolor de espalda, la hinchazón de los tobillos y la trombosis venosa profunda. 

Es preocupante que ir al gimnasio después del trabajo no compense el daño de sentarse, y el exceso de estar sentado daña tanto a las personas delgadas como a las obesas. 

Los estudios, miles de ellos, profundizan en el mismo punto: sentarse es letal.

Algunos estadounidenses se sientan durante 13 h/d. ¿Cómo puede algo que hacemos tanto ser tan peligroso? Parece inverosímil. Pero hay otras funciones de la vida que han demostrado ser dañinas. Por ejemplo, tomemos el comer: comemos varias veces al día, pero no necesitamos que nos convenzan de lo dañino que se ha vuelto comer. Comer, como sentarse, es potencialmente mortal cuando se hace en exceso. El diseño ambiental puede afectar cada respiración que uno toma: Considere la difícil situación de un asmático en un día de alto nivel de smog en Los Ángeles. Incluso respirar puede ser peligroso en un entorno perjudicial.
¿Cómo nació Global Chair Seduction sin que nos diéramos cuenta? Los primeros humanos, Homo , abandonaron los bosques de África a pie. Los cráneos fosilizados de Dmanisi encontrados en la república de Georgiamostró que el Homo primitivo caminaba erguido. Durante 2 millones de años, las mejoras humanas progresivas evolucionaron y estas implicaron aumentar la complejidad de sus cerebros, caminar cada vez más erguidos y estar activos la mayor parte del día.Los primeros y más profundos inventos —el fuego, la rueda, la construcción de puentes, las técnicas de guerra, la fortificación, la caza y la agricultura— surgieron todos de mentes, manos y cuerpos activos.La Revolución Industrial, hace 200 años, precipitó el mayor cambio en el “estilo de vida” humano desde nuestra evolución: la urbanización. En 1900, menos del 10% de la población mundial vivía en ciudades; ahora, más de la mitad de la población mundial vive en ciudades. La Revolución Industrial sedujo a la gente de las comunidades agrícolas a las ciudades sedentarias repletas de fábricas.La modernidad entonces despojó a las personas del libre pensamiento para convertirse en esclavas de los dispositivos electrónicos.
Una vez que se afianzó la Revolución Industrial, la permanencia letal se volvió inevitable. En la década de 1800, se inventaron líneas de producción de fábrica para disminuir la necesidad de que un trabajador pierda el tiempo caminando.Poco después, se desarrollaron las oficinas modernas con la premisa de que cuantos menos minutos se movieran los trabajadores durante la jornada laboral, menos tiempo se perdería. La década de 1930 vio el surgimiento del archienemigo: la silla de oficina. La automatización y mecanización del lugar de trabajo siguió con la introducción de máquinas de escribir, dictáfonos, intercomunicadores y máquinas sumadoras, todo lo cual disminuyó el movimiento. En la década de 1950, los automóviles producidos en masa y asequibles llegaron al mercado y la gente dejó de caminar al trabajo y condujo. Lo último fue la informatización basada en escritorio y la conversión del juego activo al juego electrónico. A la naturaleza le tomó 2 millones de años diseñar al ser humano dinámico y caminante, y a esos humanos les tomó 200 años revertir el arte de la naturaleza y meter a la gente todo el día en sillas. Y así, insidiosamente, el presidente, el supervisor sentado en secreto, había ganado.
El impacto fisiológico de convertir una forma de vida ambulatoria tradicional a una sentencia de silla está demostrado por estudios en comunidades agrícolas. En Jamaica, por ejemplo, las personas que viven en comunidades agrícolas se sientan la mitad que las personas del mismo peso que viven en las zonas urbanas de Kingston.Curiosamente, los habitantes urbanos de Kingston tienen hábitos para sentarse similares a los de los norteamericanos urbanos. Los jamaicanos que viven en comunidades agrícolas se sientan alrededor de 3 horas cada día, mientras que un trabajador estadounidense promedio puede pasar 13 horas sentado.La sentencia silla es un manto de modernidad.
Una consecuencia obvia de vivir en una silla es que los cuidadores gastan menos calorías que los que se mudan. En comparación con el descanso reclinado, sentarse aumenta la tasa metabólica en un 5 %, mientras que caminar, incluso a 1 mph, aumenta el gasto de energía en un 100 %.Una reunión de trabajo realizada a paso de paseo gasta entre 150 y 200 kcal más, por asistente, que una reunión similar realizada con los asistentes sentados en sillas. Sentarse gasta casi tan pocas calorías como dormir.
Si las personas que se sientan más comieran menos, el peso corporal podría permanecer estable. Pero las personas que pasan más tiempo sentadas no reducen su consumo de calorías de forma adecuada. En los últimos 2 siglos, la ingesta de energía per cápita no ha disminuido.La gente moderna quema muchas menos calorías y no logra frenar su consumo; como consecuencia, comen más calorías de las que gastan. ¿Es una sorpresa que el Homo sedentarius tenga obesidad?
Debido a que la gente moderna está rodeada de sillas (de 3 patas, de 4 patas, con ruedas, de oficina, de teatro, sofás y asientos para automóviles), ¿por qué no todos tienen obesidad? La gente delgada debe tener un secreto. Para descubrir los tejemanejes secretos de los oficinistas delgados y modernos, se pusieron ropa interior entrelazada con varios sensores de movimiento y postura corporal.La ropa interior reveló el secreto de la delgadez: las personas delgadas tienen una alta termogénesis de actividad sin ejercicio (NEAT).
NEAT es la energía que una persona gasta en su vida diaria: las calorías gastadas antes, durante y después del trabajo y en el tiempo libre. Debido a que la mayoría de las personas no se entregan al ejercicio con propósito, NEAT representa el componente más prometedor del gasto energético humano que puede modificarse. En los países de ingresos altos, las personas se sientan la mayor parte del tiempo que están despiertos y tienen NEAT bajo. Las personas delgadas tienen NEAT alto, a pesar del atractivo de la cátedra; se levantan y caminan 2 ¼ h/d más que las personas con obesidad. Los magros queman 350 kcal/d adicionales de NEAT; es un poderoso motor para evitar la obesidad.
¿Cómo se regula NEAT? ¿Por qué las personas con obesidad tienen bajo NEAT? NEAT y su antítesis, el sedentarismo, están hasta cierto punto controlados biológicamente. Los estudios en animales demuestran un complejo circuito neuronal integrado que impulsa a un animal a aumentar NEAT o volverse sedentario. Un centro de control neural clave se encuentra en el núcleo paraventricular del hipotálamo. Aquí, los mediadores neurales como la orexina y la neuromedina U activan el movimiento.La potencia de estas señales aumenta en animales endogámicos por delgadez. Los animales endogámicos por sedentarismo y obesidad responden menos a las señales NEAT. En términos humanos, esto implica que algunas personas pueden ser biológicamente propensas a seguir moviéndose mientras que otras nacen para sentarse. Observe a cualquier grupo de personas: algunos se moverán y parecerán inquietos, mientras que otros se quedarán quietos.Es probable que la biología sea importante para determinar si una persona es una niñera o un motor. Sin embargo, es probable que los estímulos ambientales sean más importantes.
Las señales ambientales son los determinantes predominantes del sedentarismo.El genoma humano no ha cambiado sustancialmente en 200 años, pero durante ese tiempo la postura predeterminada de los humanos ha cambiado de ambulatoria a sentada en una silla. La sociedad/medio ambiente urbano debe ser el culpable. En los Estados Unidos, el código postal de una persona es un indicador clave del sedentarismo.Más específicamente, las personas que viven en regiones densamente pobres tienen más probabilidades de ser sedentarias y de tener diabetes mellitus y obesidad que las personas que viven en áreas más ricas. Debido a que la pobreza no es una elección personal y el código postal de una persona no está predeterminado genéticamente, los determinantes sociales del sedentarismo deben anular las fuerzas biológicas. Para los trabajadores de oficina, por ejemplo, las oficinas modernas obligan a las personas a sentarse frente a las computadoras durante la mayor parte del trabajo. Además, muchas ciudades importantes, como Los Ángeles, requieren que las personas usen automóviles en lugar de caminar. Otros predictores socioambientales del sedentarismo incluyen el clima, la seguridad al aire libre, la violencia doméstica y la proximidad de las casas a los parques.
Si los entornos basados ​​en sillas apilan las cartas contra incluso la mejor biología, ¿hay alguna esperanza? ¿Está el sedentarismo homo condenado a morir por estar sentado letalmente? Existen enfoques basados ​​en resultados para ayudar a las personas a liberarse de sus sillas y levantarse. El cerebro responde a los estímulos de movimiento tanto estructural como bioquímicamente, como lo hace un músculo. NEAT engendra NEAT.
El diseño de la oficina, la escuela, el hogar e incluso la calle se puede modificar para que la vida estilo NEAT se vuelva normativa. Las oficinas pueden incentivar protocolos para reuniones a pie, incentivar interacciones basadas en las piernas (p. ej., caminar por la oficina en lugar de correo electrónico) e instalar senderos para caminar o escritorios para caminadoras. Las oficinas activas no solo reportan una mejor salud, sino también menos estrés percibido y una mayor productividad.Las escuelas pueden diseñarse para promover el aprendizaje activo, y las investigaciones demuestran mejoras en la salud, la atención y los resultados educativos. Las escaleras luminosas, limpias y atractivas con avisos visibles promueven subir los escalones mejor que las mal iluminadas, sucias y húmedas.Los beneficios potenciales para la salud de las ciudades activas son grandes. Para San Francisco en 2013, el tiempo promedio de viaje a pie de una persona fue de 4 min/d. En un escenario de viaje activo basado en tramos, los viajes diarios promedio aumentarían en 18 minutos. Los beneficios para la salud serían un potencial de 2404 muertes prematuras evitadas por año. Este grado de mejora de la salud figuraría entre los mayores avances sanitarios de la historia moderna,y los ahorros en costos de atención médica en San Francisco se aproximarían a $34 mil millones/año. Existen soluciones probadas para combatir el sedentarismo y frustrar al Presidente.
Sentarse demasiado se ha extendido insidiosamente en la sociedad, de modo que la adicción a las sillas se ha convertido en un sello distintivo de la modernidad. Los 2 artículos de esta edición de Mayo Clinic Proceedings , junto con una gran cantidad de otros datos, subrayan la nocividad de la silla. Sentarse mata a más personas que fumar porque más personas se sientan excesivamente que fuman, y las secuelas para la salud de sentarse son más numerosas.Hay soluciones que funcionan para prevenir el sedentarismo, pero el desafío de remediarlo es amplio y profundo. ¿Abandonaremos nuestras piernas y dejaremos que gane el Presidente? o vamos a actuar? ¡Toma una posición y levántate!

Referencias

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